Roberto del Castillo, una carrera multifacética

#RepublicaMerengue : colaboración
Roberto del Castillo, es un reconocido artista nacido en Hato Mayor Del Rey, con una carrera multifacética que abarca la música, específicamente el merengue y el bolero, así como incursiones exitosas en el mundo de la comunicación. Su historia musical se remonta a su adolescencia, cuando su talento fue descubierto por Johnny Ventura en una fiesta patronal celebrada en su pueblo natal.
Ventura, una figura icónica en la música latina, se convirtió en su mentor y colaborador durante más de 40 años. Inicialmente, se unió a la orquesta como baladista y bolerista, pero su paso por este grupo emblemático no sólo le permitió perfeccionar su estilo en esos géneros musicales, sino que también le brindó una sólida formación en merengue y guaguancó.
A lo largo de su carrera, Roberto del Castillo se destacó por su versatilidad musical y su capacidad para fusionar diferentes ritmos, lo que le valió éxitos significativos en la escena del merengue. Algunas de sus canciones más reconocidas como solista incluyen «Agua Viva», «Justo a Tiempo», «Hasta que Conocí», «La Competencia», «Mi Novia» y «Mi Mujer». Su contribución al bolero y su habilidad para interpretar este género también han dejado una huella notable en la música latina, consolidándolo como un artista polifacético y respetado en el ámbito musical.
A pesar de su enorme talento como cantante, nunca se fue del lado del caballo Mayor Johnny Ventura, a quien consideraba su papá. Y que conste, ofertas nunca faltaron ya que muchas veces lo tentaron para hacerle una orquesta e incluso invitaciones de agrupaciones establecidas en el país y fuera, pero entendió que como conoció el mundo con Johnny Ventura, se le abrirían muchas más puertas estando a su lado.
Roberto asegura que tuvo más tiempo con el Combo Show que lo que duró con su padre, porque llegó a la orquesta siendo un muchachito. Por allí vio desfilar a muchos cantantes, entre ellos Octavio Polanco, David Santiago, Orlando Penn, Robert Jeandor, René Solís, Michel “El Buenón”, Johnny Vargas, Eddy Quiroz y otros más.
Con Johnny Ventura pisó por primera vez el Festival de Viña del Mar, convirtiéndose de hecho en los primeros merengueros en presentarse en este prestigioso festival internacional. En Texas se presentaron con el Gran Combo, donde el merengue no había llegado, al igual que en otros puntos importantes de Estados Unidos. Sin lugar a dudas Del Castillo con el Combo Show conoció muchos países de Sudamérica, donde tenían que enseñarles los pasos del merengue a las mujeres para que pudieran bailar, al igual que en las islas de Martinica, Aruba, Bonaire, Curazao, San Martín y muchas otras.
Aunque su éxito en la música es notable, Roberto del Castillo también incursionó con éxito en la comunicación. Comenzó su trayectoria como comunicador en programas como «La Fiesta del Consumidor» y «La Alegría del Mediodía». Su transición de la música a la televisión fue fluida debido a su experiencia previa en la interacción directa con el público mientras formaba parte de la orquesta de Johnny Ventura.
Esta habilidad para conectar con la audiencia, combinada con su carisma natural, le permitió destacarse como presentador en un programa tan emblemático como «El Show del Mediodía». Legado y reconocimiento La amistad y colaboración cercana con Johnny Ventura fueron piedras angulares en la carrera de Roberto del Castillo, quien ha dejado una marca significativa en la música latina.
Su habilidad para fusionar diferentes géneros musicales, su trayectoria sólida como cantante y su éxito en el mundo de la comunicación televisiva lo posicionan como un artista versátil, talentoso y respetado en la industria del entretenimiento en la República Dominicana y más allá.
Su fidelidad hacia Ventura sobrepasa la muerte, pues después del duro golpe de la partida del caballo Mayor, no pensó ni un instante en separarse y hacer tienda aparte, sino al contrario, lo vemos junto a los hijos de Johnny en el proyecto musical El Legado Del Caballo.
Idea original: Oscar Quezada